miércoles, 31 de octubre de 2007

¿Es un ave, es un avión, es... es... está en bolas?

Tomé la fotografía una noche al volver del trabajo.
Ahí donde se ve, entre el paragolpes de un auto y un contenedor de basura, estaba el misterioso conjunto de ropa, encimado sobre una caja con motivos de Winnie The Pooh.
Le di a la foto una relativamente buena resolución para que lo puedan apreciar como corresponde.
Un pantalón bastante sucio pero buen estado, acompañado de un par de zoquetitos y hasta con un cinturón de cuero haciendo juego, estaba tirado como si nada y disparó en mi mente una fantástica hipótesis.
Seguramente un Superman vernáculo -o versúculo, ya que se habría quitado los pantalones- tuvo que descambiarse de apuro para salir de raje a rescatar a alguien. Ya sabemos que las casetas telefónicas son poco menos que elementos extintos. De ahí que para hacer más rápido hasta junto con el lompa se sacó medias y todo.
Esta forma de descambiarse es doblemente meritoria si además fue rápida: todos sabemos que Superman lleva sus slips puestos arriba de los pantalones, y no es moco de pavo desprenderse del vaquero sin sacarse los calzones.
Claro, suponiendo que se haya dejado los calzones puestos y no haya iniciado su vuelo refrescando en demasía las que te jedi.

domingo, 28 de octubre de 2007

Memoria colectiva

Se dice que los pueblos tiene su propia memoria colectiva.
Pablo Tossi encontró el lugar donde la guardan.

domingo, 21 de octubre de 2007

La vida de los autos XVIII: El esclavo

(la fotografía es un genial hallazgo del Sr. Chester Lampwick)

Que la calle cada día está más insegura lo sabemos todos.
Por eso no extraña que los dueños encadenen a sus vehículos a los árboles o las columnas de la vereda.
Lo que sí es preocupante es que muchas personas se amparen en esta situación para esclavizar y amarrar sus autos sin otro motivo que el de reducirlos a la servidumbre y una vida de esfuerzos nunca recompensadas.
Conmino a todos aquellos dueños de corazón probo que combatan este horrible flagelo, denunciando los casos de los que tengan conocimiento y para aquellos de alma más combativa directamente les sugiero cortar cadenas y candados para proceder a la liberación efectiva de nuestros queridos rodados.
Desestimen además cualquier intento de convencernos de que en realidad se trata de autos intentando esclavizar a los árboles.

martes, 9 de octubre de 2007

Nos vemos la próxima temporada

Voy a ausentarme un tiempito, como en las series de la tele, que cortan un par de semanas y luego vuelve a empezar la nueva temporada.
Acá es igual, pero sin plata.

Los motivos serios del hecho están aquí y los no tanto acá, no voy a andar escribiendo todo dos veces...

sábado, 6 de octubre de 2007

El Falcon de Noé

(fotografía tomada en La Plata por María Pía Panzica (gentileza de mi involuntaria correctora personal ad-honorem Gabrielaa)

-¡Huy!, Noé, ¡tanto tiempo!
-¿Qué acelga, caballo?, dale, subí que se está por largar el agua.
-Che, ¿no te voy a ensuciar el tapizado?
-Nimporta, total todavía tengo que levantar al casalito de chanchos que tengo en Burzaco.
-Listo, che... está linda la máquina, eh, ¿qué modelo es?
-Es sesenta y siete, pero parece del 69, ¿no?
-Si, hasta le pusiste cinturones de seguridad de cuero... ¿cuero de qué es esto, che?
-No bolú, dejá que son las boas que me traje del norte... no sé para que hay que salvar a estos bichos de mierda, también.
-Mejor no me las pongo entonces.
-¿Y la yegua de tu mujer?
-En lo de mi suegra. Cuando pasemos a buscarla no te equivoqués, subás a la vieja y me dejés la jermu abajo, eh? Mirá que ahí nomás nos extinguimos los caballos, que yo a la momia no la toco ni con el rebenque del dueño. ¿Che, no te jodo así, no?
-Si podés agachá un poco el lomo que me tapás el espejo...
-Huy, mirá quien está ahí, el burro y su señora.
-Asomate y pegale el grito así los llevo también ahora y nos ahorramos un ida y vuelta.
-Dale, pero después no levantés más a nadie, tampoco es cuestión de viajar como ganado.

lunes, 1 de octubre de 2007

Poneme 50 de quebracho sin plomo

¿La nafta está a precio de oro líquido?
¿El gasoil escasea y se fue a las nubes?
¿No tenés para poner el tubo de GNC?
Hacé como yo. Adaptá el motor de tu auto para que funcione a carbón como en las queridas épocas de la revolución industrial inglesa y de paso en las butacas traseras te preparás unos choris.
Útil para el camping en verano, calentito en el invierno.
Sin peligrosas emanaciones combustibles, sin surtidores, sin ataduras con los pesados monopolios petroliferos, ¡sin mosquitos!