lunes, 26 de mayo de 2008
jueves, 22 de mayo de 2008
La vida de los autos XXVI: El beato

Obviamente, una persona con tantas imágenes religiosas pegadas en la luneta, no podía tener otra calcomanía que no fuera la de "Cerrajería San Pedro".
Eso es infinitamente mejor que el Geriátrico San Pedro que supo existir en la zona norte de Rosario.
Lamentablemente quedaron fuera de encuadre la llavez cruz y el extinguidor para apagar hasta los fuegos del averno.
lunes, 19 de mayo de 2008
Es que tomé con el tanque vacío
¿Sabés lo que pasa?, me mandé como veinte litros de super, unos diez de Fangio y después le pegué sin asco a la sin plomo.
Y todo eso con el tanque vacío. Tomar tanto sin tener nada sólido en el estómago te pega mal. Eso y la mezcla que hicimos.
Es que estábamos de fiesta, un sedán amigo, dos coupés fuertísimas, muy bien de gomas -unos neumáticos japoneses que para qué te cuento- y yo. Trago va, trago viene, ronroneo de acá, picadita de allá, la cosa se me fue de las manos.
Un rato después, tenía un revoltijo adentro, mirá que tengo GNC pero nunca sentí tantos gases. La descompostura que me agarró fue terrible.
Por suerte disimulé y me fui solo para la esquina. No alcancé a dar la vuelta que lancé todo.
Un asco, no podía parar. En un santiamén vacié todo lo que tenía adentro.
La verdad es que me di vuelta como una media.
Al rato volví con las chicas y mi amigo, pero ya no fue lo mismo, estaba destruido.
Ahora me estoy cuidando, no estoy saliendo a la calle. Por unos días, agua destilada para la batería y hasta ahí me animo nomás.
Y todo eso con el tanque vacío. Tomar tanto sin tener nada sólido en el estómago te pega mal. Eso y la mezcla que hicimos.
Es que estábamos de fiesta, un sedán amigo, dos coupés fuertísimas, muy bien de gomas -unos neumáticos japoneses que para qué te cuento- y yo. Trago va, trago viene, ronroneo de acá, picadita de allá, la cosa se me fue de las manos.
Un rato después, tenía un revoltijo adentro, mirá que tengo GNC pero nunca sentí tantos gases. La descompostura que me agarró fue terrible.
Por suerte disimulé y me fui solo para la esquina. No alcancé a dar la vuelta que lancé todo.
Un asco, no podía parar. En un santiamén vacié todo lo que tenía adentro.
La verdad es que me di vuelta como una media.
Al rato volví con las chicas y mi amigo, pero ya no fue lo mismo, estaba destruido.
Ahora me estoy cuidando, no estoy saliendo a la calle. Por unos días, agua destilada para la batería y hasta ahí me animo nomás.
miércoles, 14 de mayo de 2008
viernes, 2 de mayo de 2008
Predicar con el ejemplo

¿Ves nene?, ¡éstas son las cosas que quiero que aprendas de tus mayores!, ¡Mirá que linda y parejita la letra!
¡Por favor, Román! No lo permitas, no cedas ni un centímetro.
¿Te imaginás tu barrio "tatuado" con mensajes como "Román, dejá de comer porquerías. Tu abu Teresa.", "Vamos, primo, dale que ya tenés entregada a la de al lado. El Tuchi.", "¿Estás son horas de llegar, Román?. Tu viejo." o "Román, ¿te acordás cuando te ponía talquito porque se te paspaba la colita?. Mami.".
Pensalo, Román, pensalo.
¿Te imaginás tu barrio "tatuado" con mensajes como "Román, dejá de comer porquerías. Tu abu Teresa.", "Vamos, primo, dale que ya tenés entregada a la de al lado. El Tuchi.", "¿Estás son horas de llegar, Román?. Tu viejo." o "Román, ¿te acordás cuando te ponía talquito porque se te paspaba la colita?. Mami.".
Pensalo, Román, pensalo.
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